Teñirte el pelo durante la lactancia: lo que debes saber

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En España, el 46,9% de las madres dan el pecho tras el parto, pero solo el 28,5% lo hacen de forma exclusiva. Esto se debe a que en múltiples ocasiones se producen problemas durante la lactancia, además la producción de leche materna puede disminuir y surgen muchas dudas sobre el tema.

Una de las dudas más frecuentes es la de los efectos adversos que puede tener el tinte de pelo en la leche materna, y es que su contenido de sustancias químicas se ha convertido en una preocupación para las madres.

La fluctuación de hormonas durante el embarazo y el posparto provoca cambios en la piel y el cabello. Como resultado, puede que tu color habitual de melena cambie, incluso puede causar irritaciones en el cuero cabelludo que nunca antes habías experimentado. Si decides tintarte el pelo, debes saber la probabilidad que hay de que las sustancias químicas lleguen a tu organismo.

Tabla de Temas

¿Qué tinte de pelo es menos peligroso?

Es importante diferenciar entre los tintes permanentes, las mechas y la coloración semipermanente. Los primeros suelen empapar el pelo y tocar el cuero cabelludo durante un tiempo, por lo que, aunque puedes utilizar este método, las sustancias químicas tienen más probabilidades de pasar a tu organismo.

En cuanto a las mechas y los reflejos, es cierto que pintan en el pelo, pero no en el cuero cabelludo. Por último, la coloración semipermanente también es más segura: aunque se aplica sobre el cuero cabelludo, está hecha con fórmulas químicas más suaves.

Por otro lado, los químicos utilizados varían según el tratamiento que se lleve a cabo.

  • Para rizar el pelo o hacer ondas permanentes, los productos químicos más utilizados han sido el tioglicolato de amonio y el amoníaco.
  • En el caso de decolorar el pelo tienen peróxido de hidrógeno.
  • Los alisadores de pelo (relajantes) utilizan productos químicos como el tioglicolato de amonio o, en preparaciones más antiguas, el hidróxido de sodio.

Cualquiera de estas sustancias químicas puede irritar la piel, la nariz y la garganta. Sin embargo, según la National Library of Medicine, no se han encontrado estudios sobre la realización de tratamientos capilares durante la lactancia. Aunque sí se ha estudiado los riesgos que puede haber en la salud debido el tinte de pelo.

Riesgos del tinte de pelo para la salud

Un estudio publicado en ACS Publications, explicó que el uso de estas sustancias químicas como materias primas para la producción de tintes capilares puede dar lugar a la síntesis de otros contaminantes con toxicidad potencial y mayor riesgo de carcinogénesis.

Es una cuestión abierta si el teñido del cabello aumenta el riesgo de cáncer; sin embargo, en subpoblaciones específicas, se ha notificado una asociación positiva entre el uso de tintes capilares y la aparición de cáncer.

Es por eso que aunque a primera vista no hayan estudios que demuestren al 100% que los tintes de pelo sean perjudiciales durante la lactancia, se recomiendan tintes que contengan la menor cantidad de de sustancias químicas.

¿Qué tinte de pelo se debe utilizar en la lactancia?

Las recomendaciones se basan en el contenido de sustancias químicas de cada tinte, así que como hemos dicho antes, la mejor opción es la de las mechas y/o reflejos, ya que tintan el pelo, pero no tienen contacto directo con el cuero cabelludo.

La coloración semipermanente podría ser otra opción, aunque se aplica sobre el cuero cabelludo pero, está compuesta de fórmulas químicas más suaves. Esto no quiere decir que no puedas usar los tintes permanentes, pero es verdad que hay una mayor posibilidad de que las sustancias químicas pasen a tu organismo.

Es importante que a la hora de teñirte el pelo, si lo haces desde casa, sigas unos pasos que aseguren la salud del bebé:

  • Utiliza guantes.
  • Deja actuar el tinte el tiempo mínimo.
  • Hazlo en una habitación bien ventilada.
  • Enjuágate bien el cuero cabelludo una vez aplicado el tinte.

Los champús con sulfatos abren la cutícula del pelo y pueden filtrar cualquier color o tratamiento que le hayas hecho. Es mejor usar un champú sin sulfatos y sacarás mucho más partido a cualquier tratamiento que decidas hacerte, manteniendo tu exposición a los productos químicos al mínimo.

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