Injerto capilar: quiénes pueden y quiénes no pueden someterse a este procedimiento

Valoración: 3.38 (1093 votos)

La pérdida de cabello es una experiencia común que puede afectar la autoestima y la confianza. El injerto capilar, también conocido como trasplante de cabello, se ha convertido en una solución popular para quienes buscan recuperar su cabello perdido. Sin embargo, no todos son candidatos ideales para este procedimiento.

Tabla de Temas

¿Quiénes NO son candidatos para un injerto capilar?

Si bien el injerto capilar es una opción viable para muchas personas, existen factores que pueden impedir un trasplante capilar exitoso. Aquí te presentamos algunos casos en los que el injerto capilar podría no ser la mejor opción:

Cantidad y calidad del cabello donante

Un factor crucial para la viabilidad del injerto capilar es la densidad y calidad del cabello en las áreas donantes, generalmente ubicadas en la zona lateral y posterior de la cabeza. Si la densidad es insuficiente o el cabello es delgado y frágil, los resultados del injerto podrían no ser satisfactorios. La calidad del cabello donante también juega un papel fundamental: si no cumple con ciertos estándares de salud, los folículos trasplantados podrían no prosperar o hacerlo de forma insatisfactoria.

Alopecias no aptas para trasplantes

No todos los tipos de alopecia son subsidiarios a un injerto capilar. Algunas alopecias que dificultan o imposibilitan el trasplante incluyen:

  • Alopecia Total y Alopecia Universal: En estos casos, la falta de cabello donante en el cuero cabelludo impide la obtención de folículos pilosos para el trasplante.
  • Alopecia Areata Extensa: Esta condición, caracterizada por la pérdida de cabello en parches redondeados, puede ser causada por factores autoinmunes. Los folículos trasplantados podrían no prosperar en la zona trasplantada, mermando los resultados esperados.
  • Alopecia Cicatrizal: La presencia de cicatrices en el cuero cabelludo, causadas por lesiones, quemaduras, cirugías previas o enfermedades inflamatorias, puede inhibir el crecimiento de los folículos trasplantados.
  • Alopecia por Tracción Severa: Este tipo de alopecia se produce debido a una presión excesiva y prolongada sobre el cabello, por ejemplo, por peinados muy tensos o extensiones. Los folículos pilosos dañados ya no serían viables para un injerto capilar.

Salud del cuero cabelludo

La salud del cuero cabelludo es esencial para el éxito del injerto capilar. Algunas afecciones, como infecciones capilares, dermatitis seborreica o psoriasis, pueden generar un entorno menos receptivo para el trasplante, comprometiendo el resultado del injerto.

Edad

Si bien no existe una edad fija para realizar un injerto capilar, es recomendable esperar a que el patrón de caída de cabello se haya estabilizado. En personas más jóvenes, existe la posibilidad de que el pelo siga cayendo tras el injerto, lo que podría requerir intervenciones futuras.

Salud mental

  • Efectos del estrés: El estrés puede generar una pérdida temporal de cabello, pero esta situación suele revertirse cuando el cuadro estresante disminuye. La pérdida de cabello por estrés no es indicación de injerto.
  • Condiciones mentales específicas: La tricotilomanía (impulso de arrancarse el cabello) puede generar una pérdida significativa de cabello. Sin embargo, el abordaje en estos casos debe hacerse desde el enfoque psicológico-psiquiátrico. Si la condición subyacente no se ha tratado, la pérdida de cabello continuará tras el injerto.

Condiciones médicas

Ciertas condiciones médicas pueden afectar la viabilidad del injerto capilar. Es fundamental realizar una evaluación adecuada de la salud general.

  • Trastornos de la coagulación: Trastornos como la hemofilia o la trombocitopenia pueden aumentar el riesgo de sangrado durante y después del injerto, afectando la colocación y supervivencia de los folículos trasplantados.
  • Enfermedades autoinmunes: Las enfermedades autoinmunes, como el lupus eritematoso sistémico, pueden generar una respuesta inflamatoria excesiva o rechazo al injerto, haciendo inefectivo el procedimiento.
  • Diabetes: La diabetes puede interferir negativamente en el proceso de cicatrización, aumentando el riesgo de infecciones.

Alternativas al injerto capilar

Si bien el injerto capilar es una solución popular, no es la única opción disponible. Para aquellos que no son candidatos ideales para un injerto capilar, existen otras alternativas:

  • Tratamientos tópicos: Minoxidil y finasterida son medicamentos que pueden ayudar a frenar la pérdida de cabello y promover el crecimiento del cabello.
  • Tratamientos láser: La terapia láser puede estimular el crecimiento del cabello.
  • Prótesis capilares: Las prótesis capilares son una alternativa no quirúrgica que permite ocultar la pérdida de cabello.
  • Microinjerto de cabello: Esta técnica consiste en implantar microfilamentos de cabello en el cuero cabelludo para crear la apariencia de cabello denso.

Es fundamental consultar con un especialista para determinar cuál es la mejor opción para cada caso particular. Un profesional médico podrá evaluar tu situación individual y recomendar el tratamiento más adecuado.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Injerto capilar: quiénes pueden y quiénes no pueden someterse a este procedimiento puedes visitar la categoría Salud capilar.

Subir

Utilizamos cookies propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarte contenidos y servicios personalizados a través del análisis de la navegación. Acéptalas o configura sus preferencias. Más información